MOSTABAITS
LOS BOILES QUE VALEN MÁS DE LO QUE CUESTAN?
EXPERIENCIA VS CONOCIMIENTO
Vamos a tratar un tema que va a crear
muchísima polémica, como normalmente acostumbro cada vez que se me ocurre sacar
un artículo. Aquellos que me leéis, sabéis de antemano que siempre pido que se
dude hasta de lo que escribo; y partiendo de esta base, desde la que siempre
dejo a los lectores decidir por ellos mismos, vamos a confrontar la lógica y
conocimiento con las pautas que nos da la experiencia en las orillas:
Si os gusta sacar vuestras conclusiones,
sois inquietos y no os permitís creer en cualquier cosa que leáis o se os diga,
éste es vuestro artículo.
¡Vamos a lío!
No hace ni dos días, en mi
laboratorio, me puse a enredar practicando muchas de las cosas aprendidas,
aplicándolas a un boilie. El resultado fué el siguiente:
- Un boile diseñado para
cubrir todas las necesidades alimenticias de la carpa.
- Con un aporte energético
suficiente para que al pez le siente bien y lo reconozca de inmediato como
alimento.
- Con palatibilidad
irresistible a los sentidos de la carpa, consiguiendo más y más capturas
en menos tiempo.
- Diseñado para ser muy
digestivo y, a su vez, inducir a seguir alimentándose.
- Elaborado con los
mejores componentes del mercado, como Robin Red, soluble de pescado,
proteínas lácteas, etc.
- Con un aroma tan sutil
que jamás podrá ser repudiado por los peces, lo que a su vez discrimina el
tamaño de las capturas, consiguiendo peces de buen porte.
¿Os suena toda esta verborrea de
algo? Es lo que suelo leer una y otra vez en los paquetes de harinas, en los
botes de aroma etc.
Indudablemente usted, y le pido
perdón, se lo ha tragado, sus pupilas se han dilatado y, en la media en la que
seguía leyendo, su instinto de pescador le decía una y otra vez ¡tengo que
probarlo, debe ser la leche!
Escribir es tan sencillo que, hasta
el más tonto, como Mosta, es capaz de convencer casi a cualquier persona con
tan solo escribir un artículo.
Una vez dicho lo anterior, pasemos a
un segundo plano.
Conocimientos.
Pueden existir cientos o miles de
estudios sobre anatomía de la carpa, sobre su quimio-recepción, sus órganos, sus
sentidos y hasta su reproducción. Esto me parece muy científico y fructífero,
debe ser tenido en cuenta como inquietud y otorga conocimiento en cuanto al posible
comportamiento de un pez frente a su alimentación, reproducción y su necesidad
básica de relación con el medio. Cuando hablo de necesidades básicas de todos
los seres vivos, hablo de: necesidad de alimentarse, relacionarse y reproducirse.
Alguno me dirá que hay más cosas, pero esta relación no implica solo
comunicación entre seres de la misma especie, sino también instinto de
supervivencia, comportamiento, etc. Tener conocimientos de todos estos
instintos básicos, de la anatomía, sus necesidades alimenticias etc, no hace
más que jugar a nuestro favor; el conocimiento es poder y te hace más libre,
además de permitirte poder dar explicaciones de lo que conoces y defenderlo con
argumentos sólidos.
Durante el confinamiento vi y hasta
participé en muchas video-conferencias en directo, algunas excelentes; pero en
otras, ante cualquier pregunta o duda de terceros, no tenían argumentos ni para
defender sus posturas, llegando a tal punto de desconocimiento, después de ésas
charlas, sólo llego a la conclusión de dejar de seguir a muchísima gente,
bloquearles, suprimir sus comentarios, etc.
Pero vamos a lo que nos importa: saber
muchísimo de biología y nutrición animal, en nuestro caso de la carpa, no
implica necesariamente obtener mejores resultados. Saber muchísimo de la quimio-recepción
en el elemento acuático no implica saber cuál, o cuáles son los mejores
estimuladores de la alimentación. Me explico: existen estudios sobre este tema;
saberlos, leerlos, valorarlos, etc. no solo es necesario, más bien es
fantástico, para poder conocer más y mejor el comportamiento de un pez frente
al alimento. Pero todo ello nunca explica que es lo que realmente induce a un
pez a comer o rechazar un alimento; es decir, saber cómo huelen las carpas no
te va a decir jamás cuál es el olor favorito de todas ellas. Lo que puede
explicar que en cada pantano, unos aromas u alimentos son mucho mejores que en
otros que son un auténtico desastre. Si los estudios dicen que es bueno, deja
muchas dudas en cuanto lo aplicas en las orillas, ya que hay diferencias
abismales de un lugar a otro, e incluso entre unas jornadas determinadas y otras
posteriores, aun siendo el mismo sitio.
Los estudios nos señalan cuál o
cuáles son las necesidades nutricionales de una carpa; las proteínas
necesarias, las grasas, minerales, etc. si esto lo llevamos a un boilie,
podríamos hacer una composición en bolas que “debería”, repito, “debería” ser
la mejor del mundo; aun así, en muchas ocasiones, no obtendrá mejores
resultados que aquella que tenga ciertos componentes que sí les resultan muy
atractivos. El pan, el maíz de lata, son ejemplos indudables de cebos
universales, sea la carpa de Francia, Alemania o de Villaluenga del Rosario. En
cambio, sabores como el calamar, el cangrejo, o los afrutados, marcan la
diferencia de un lugar a otro en cuanto al número de capturas, en algunos lados
puedes triunfar y en otros comerte un bolo. Independientemente de lo que los
estudios digan que detectan, pues está clarísimo que si lo detectan, ya que por
estar en el agua transmitirán señales químicas que llegarán a los peces, pero
yo me pregunto si ése estudio es capaz de saber si se abalanzará el pez a por el
cebo o lo despreciará haciéndonos pasar una bonita tarde de relax.
Hagamos una comparación, la cual
expuse ayer mismo en un chat: un biólogo que sea una eminencia en quimio-recepción
acuática, jamás podrá decir si tal o cual aroma lo van a tomar todas las
carpas, o si esas sustancias disueltas les serán atractivas, si es así como
deseas leerlo. Al igual que la mejor eminencia en medicina olfativa sobre
personas, jamás podrá saber si un aroma es o no agradable a una persona sin
hacérselo oler y saber su posterior opinión. Una carpa nunca saldrá del agua
para comentarnos “mmmmmmmm qué cosa tan buena, Antonio”; en otro pantano,
o en ése mismo, otra carpa nos podrá decir, “¡Serás tonto! ¿No sabes que esto
a mí no me gusta?”. Estudios los hay a cientos, pero eso de los gustos, solo
lo sabremos si pescamos y si con nuestra experiencia lo comprobamos.
Experiencia.
Sólo la experiencia no vale, sería
imposible que con sólo con esto pueda uno sacar conclusiones a lo largo de su
vida; unos mínimos conocimientos hacen falta. Voy a intentar explicarme: si
tuviéramos que empezar de cero, sería imposible empezar a probar con castañas,
zanahorias, madera, metal, tipo y tamaño de anzuelo, etc… debemos de tener un
mínimo conocimiento de “qué y con qué debemos empezar a pescar”. Algo parecido
es lo que ocurre con los Boilies: no es igual usar una masilla de harina de
trigo que, con ésa misma harina añadir un chorreón de anís; esto lo aprendimos
todos desde nuestros comienzos, no era igual pescar con lombriz, con caracol o
patata hervida, etc.
Siempre he dicho que hacer Boiles es
fácil, hacer buenos Boiles, ya no lo es tanto y hacer Boiles para anzuelo no
está a la altura de todo el mundo. Los
que tenemos conocimiento de hacer bolas, lo intentamos, empezando por mí, cada
vez que se nos ocurre algo. Hay quien hace bolas, saca algún pez y comprueba
que funciona, excelente, te felicito, pero de ahí a que sean buenos Boilies media
un largo trecho. Ya no hablo solo del aporte nutricional que tenga, hablo de
muchos más factores. Me he encontrado a personas que hacen Boilies y han
pescado, digamos que en pantanos muy fáciles obtienen capturas; pero eso es lo
normal en ésos pantanos. Hacer Boilies y probarlos en pantanos como Cazalla de
la Sierra, Tentudia o Sierra Brava no es haber conseguido una bola excelente,
ni tan siquiera mediocre. Poco tiempo después, si se enfrentan a otros
escenarios comienzan a dudar hasta de lo que hacen y no te digo nada de los que
tienen la ilusión puesta en los Boiles caseros tuyos o de otros que tanto esfuerzo
o ilusión le pusimos haciéndolo.
La cuestión radica en: más importante
que saber, es probar, probar y probar hasta la saciedad. Soy uno de los pocos tontos
que, si voy a un pantano, y llevo 4 o 5 peces con un cebo, lo cambio para
probar otros de fabricación reciente. Algunos se extrañarán diciendo que porqué
pierdo el tiempo así, pues es porque… gano experiencia: cuando hago una bola y
agrego un componente, lo pongo en cantidades ingentes para saber si ese
componente es el que marca o no la diferencia; hago la misma bola una y otra
vez, cambiando las proporciones; actúo de esta forma, con todos los ingredientes
de esa bola, asi descarto componentes efectivos y no efectivos. Luego esas
bolas siguen en mis pruebas de pesca por más de un par de años. Si compruebo
que 8 de cada10 veces dan buenos resultados en diferentes lugares y estaciones
del año, bajo condiciones diferentes, han superado la prueba… quizás de los 7 u
8 componentes luego me quedo con uno o dos como mucho. La experiencia ganada me
hace, a la larga, ahorrar muchísimo tiempo y dinero fabricando Boilies muy
efectivos, y disfrutar de mi objetivo, sacar la mayor cantidad de peces posible
en todos los escenarios.
Los Boilies son como la comida: puede
ser la más perfectamente nutritiva del mundo, pero quizás no sea la más sabrosa
y atractiva, eso sólo lo da la experiencia de estar un día y otro pescando y
bajo condiciones distintas en lugares diferentes. Por mucho estudio que lea,
por mucho aplicar la teoría, la experiencia supera a todo lo aprendido. ¿Has
estudiado una carrera? ¿Eres licenciado? Te felicito; a mí me ocurrió que,
durante la mía, aprendía muchas matemáticas, mucha química, biología etc, pero
nadie me enseñó a enfrentarme a una clase con 25 alumnos y obligarlos a hacer algo
que odian de buen grado. ¿Te sientes reflejado? Pues a algo así me refiero: Los
estudios son buenos, pocos niños superan mis conocimientos, pero aprendí a dar
clases estando día a día en el aula. De igual forma, con la pesca, si la teoría
dice algo y la ejecuto tal cual la cuentan, al llevarla a la práctica debería
funcionar, sí o sí, pero nada más lejos de la realidad; prueba, ensayo y error,
aprendiendo y practicando hasta obtener experiencia. Para mí es lo que
realmente marca la diferencia entre el éxito y el fracaso. Cada error cometido
es un paso menos al fracaso, cada decepción es un acercamiento al acierto, y
cada acierto es ya un triunfo. Es lo más simple que puedas pensar y lo más
efectivo: ¿Esto funciona? ¡SI¡ Pues lo uso… Ahhh que no funciona, pues ya no lo
uso… NO TE PREGUNTES PORQUÉ, JAMÁS SABRÁS LA OPINIÓN DE UN PEZ… PERO ÉSA OPINIÓN
ES LA ÚNICA QUE CUENTA Y SÓLO LA SABEMOS CON EL NUMERO DE PICADAS.
Para terminar.
EN DEFINITIVA, LOS ESTUDIOS PUEDEN
SERVIR DE BASE, PERO PARA TRIUNFAR, ES MEJOR BÁSATE EN LA EXPERIENCIA.
Os ruego que estos pensamientos
MOSTALIANOS no sean tomados como verdades absolutas, tú debes pensar,
recapacitar, sacar tus conclusiones y cuestionar todo lo que acabas de leer;
porque nadie más que tú, y solamente tú, es el más perfecto para saber “tu
verdad” y sacar tus propias conclusiones probando y experimentando en tus
embalses.
UN SALUDO, BUENA PESCA Y… NOS VEMOS
EN LAS ORILLAS.
Que boilie usar en la fernandina
ResponderEliminar